No quedaba un solo ser vivo en kilómetros. Tras un largo y multimillonario proceso de limpieza y lavado de imagen, se pasó a crear en este lugar una figura de protección que se dio a conocer como el Corredor Verde del Guadiamar, prohibiendose la pesca y el acceso a la mayoría de los rincones, con el objetivo de "proteger" de toda agresión a este "idílico" lugar... O es que quizá la Junta de Andalucía no quería que nadie apareciera por allí y pudiera airear el fracaso y las miserias de nuestra ANDALUCÍA IMPARABLE...
Una década despues, acceder a las orillas del Río Guadiamar es deprimente. Orillas intransitables, descuidadas, es casi imposible pescar... Uno no tiene la sensación de que este paraje haya sido protegido, más bien parece que se ha querido crear una burbuja, en el espacio y en el tiempo, que nos haga buscar otros lugares para nuestro esparcimiento. Los pocos huecos que dan acceso nos muestran la verdadera realidad de una política medioambiental indigna, barata y oportunista.
Realmente con historias como las del maltrecho Rio Guadiamar me averguenzo de nuestros gobernantes...
¿Se puede hacer algo para cambiar todo esto?...CLARO QUE SI